Periodoncia e Implantologia oral

by Laura Manonelles 21/12/2012

La periodontitis o comúnmente conocida como piorrea, es una enfermedad crónica e irreversible que inicialmente cursa como una gingivitis inicial, para evolucionar posteriormente con una pérdida de inserción colágena, recesión gingival y pérdida de hueso alveolar hasta, en el caso de no ser tratada, dejar sin soporte óseo al diente y provocar defectos óseos. De etiología bacteriana que afecta al periodonto (tejido de sostén de las piezas dentales) se manifiesta más comúnmente de adultos mayores de treinta años, aunque puede iniciarse a más temprana edad.

La falta de higiene, los cambios hormonales, el estrés, enfermedades sistémicas, diferentes fármacos,… pueden iniciar un proceso de gingivitis que deberá ser controlado y tratado clínicamente para que no finalice en una periodontitis.

Imagen de la evolución degenerativa de la encía por proceso inflamatorio:

El tratamiento de la periodontitis consistirá en la eliminación de los factores etiológicos mediante raspados y alisados radiculares y, su control, se realizará con sondajes periodontales periódicos.

Los defectos óseos pueden presentarse anatómicamente de diferentes formas pudiéndose diferenciar entre horizontales, verticales y circunferenciales; variando dentro de un mismo individuo, se puede diferenciar en función de su grado , forma, distribución, localización, apertura de los puntos de contacto dental, grado de impactación alimentaria, relación de las crestas marginales adyacentes o lesiones traumáticas.

Los defectos óseos pueden comprometer el éxito del tratamiento quirúrgico con implantes dentales.

Previo a la colocación del implante dental hay que realizar un estudio radiográfico y una exploración bucodental para valorar el estado del hueso alveolar. Si el paciente ha padecido periodontitis que le ha conllevado una pérdida de hueso alveolar, se deberá determinar cuál será el procedimiento quirúrgico a seguir y que técnica se determinará para corregir el defecto óseo.

Imagen de un defecto óseo provocado por enfermedad periodontal avanzada:

El resultado de la cirugía será lograr una nueva inserción y una reparación de la zona. En estos procesos quirúrgicos no es estrictamente necesario el empleo de materiales para favorecer la regeneración de los tejidos, aunque existen ciertas situaciones donde estaría indicado el uso de este tipo de materiales o injertos de y para la regeneración; estos materiales pueden ser:

  • Autógenos, es decir, pertenecen al mismo paciente.
  • Alógenos; Éstos pertenecen a un individuo de la misma especie.
  • Aloplásticos o sintéticos; Son aquellos sustitutivos sintéticos, inorgánicos, biocompatibles y/o bioactivos. Éstos son los más utilizados en la actualidad y promueven la cicatrización mediante la osteoconducción.

La mayoría de los injertos óseos se reabsorben y sustituyen al hueso natural perdido con el trascurso de unos meses.

A la pregunta de si una persona con una periodontitis avanzada y que ha padecido la avulsión o pérdida dental por la destrucción de tejido óseo alveolar, se puede colocar un implante dental, la respuesta es sí. El procedimiento o plan de tratamiento con dicho paciente, consistiría en varias fases; serían:

  • Fase higiénica. Esta fase es vital importancia para el éxito posterior de la rehabilitación o implante. El paciente deberá someterse a raspados o curetajes y al control mediante sondajes periodontales con el fin de estabilizar la enfermedad periodontal; También, se deberán adquirir hábitos higiénico-prácticos por parte del paciente.
  • Solamente cuando esta fase sea estable y la pérdida de hueso esté controlada, se podrá valorar la rehabilitación de la zona a tratar mediante injerto aloplástico o sintético y la colocación del implante.
  • Fase regeneradora. En esta fase y mediante una técnica quirúrgica predeterminada, se dispondrá a rehabilitar el defecto óseo con la utilización de un injerto adecuado, normalmente sintético. Éste injerto sustituirá el hueso ausente en el plazo de unos meses.
  • Fase quirúrgica. En esta fase se colocará el implante dental. El tiempo a colocar la prótesis sobre implante deberá calcularse con sumo cuidado y teniendo en cuenta el tipo y clase de hueso presente en el momento de la cirugía.

El paciente, durante las tres fases anteriores, deberá realizarse controles periodontales y radiográficos para seguir la evolución del tratamiento, y tras la colocación de la prótesis sobre implante, deberá hacerse revisiones periódicas.

Si los defectos o pérdidas óseas son poco importantes, tras la fase higiénica se puede realizar la fase regeneradora y quirúrgica en la misma sesión.

Unas encías sanas son el mejor presente para una rehabilitación futura.


Categorías: Implantes dentales | Periodoncia
Tags:

Entradas por mes